10 agosto, 2010

CITAS Y RECORTES - 2

 

(…) Ocuparse demasiado de uno mismo produce una terrible fatiga. Un hombre en esa posición está ciego y sordo a todo lo demás. La fatiga misma le impide ver las maravillas que lo rodean.

Cada vez que un hombre se propone aprender tiene que esforzarse como el que más, y los limites de su aprendizaje están determinados por su propia naturaleza. Por tanto, no tiene sentido hablar del conocimiento. El miedo al conocimiento es natu­ral; todos lo experimentamos, y no podemos ha­cer nada al respecto. Pero por temible que sea el aprendizaje, es más terrible la idea de un hombre sin conocimiento.

Enfadarse con la gente significa que uno consi­dera que los actos de los demás son importantes. Es imperativo dejar de sentir de esa manera. Los actos de los hombres no pueden ser lo suficiente­mente importantes como para contrarrestar nues­tra única alternativa viable: nuestro encuentro inmutable con el infinito. (…)

 

(LAS ENSEÑANZAS DE DON JUAN)

 

zap 1 zap 1 zap 1

No hay comentarios:

Publicar un comentario