28 septiembre, 2010

CITAS Y RECORTES - 8

 

diez est 2

El hombre corriente se preocupa demasiado por querer a otros o por ser querido por los de­más. Un guerrero quiere; eso es todo. Quiere lo que se le antoja o a quien se le antoja, sin más, por­que sí.

Un guerrero acepta la responsabilidad de sus actos, hasta del más trivial de sus actos. El hombre corriente actúa según sus pensamientos y nunca asume la responsabilidad por lo que hace.

El hombre corriente es o un ganador o un per­dedor y, dependiendo de ello, se convierte en perseguidor o en víctima. Estas dos condiciones prevalecen mientras uno no ve. Ver disipa la ilusión de la victoria, la derrota o el sufrimiento.

Un guerrero sabe que espera y sabe lo que espera; y mientras espera no desea nada, y así cualquier cosa que recibe, por pequeña que sea, es más de lo que puede tomar. Si necesita comer, encuentra el modo porque no tiene hambre; si algo lastima su cuerpo, encuentra el modo de pararlo porque no tiene dolor. Tener hambre o tener dolor signi­fica que el hombre no es un guerrero, y las fuerzas de su hambre y de su dolor lo destruirán.

Negarse a sí mismo es una entrega. Entregarse a la negación es, con mucho, la peor de las entregas; nos fuerza a creer que estamos haciendo algo valioso, cuando de hecho sólo estamos fijos den­tro de nosotros mismos.

(UNA REALIDAD APARTE)

 

2 comentarios:

  1. Un guerrero quiere, eso es todo. Me guató esa definición. El desapego es LA cualidad del guerrero.
    Besotes.
    PD: Ya elegí plantilla y espero que me dure. :-)

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  2. QUIERE PORQUE SÍ. ES GENIAL.
    (está buena la plantilla. y que dure lo que dure... ;-))
    besoooo

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